“En la Ciudad de Buenos Aires la policía en vez de cuidar a los vecinos reprime a jubilados, pero también golpea y detiene a enfermeros”, exclamó a Tiempo Analía, que tiene internado en el Borda a su hijo de 42 años.
Los trabajadores de ese hospital vivieron un momento inesperado dentro de las instalaciones del centro de salud mental. Al menos dos enfermeros y un camillero fueron detenidos “de manera brutal e injustamente por un policía de la Ciudad”. El mismo es consigna de un paciente. El hecho courrió fuera de su sector asignado, sin identificación y con portación de arma. Este acto contra el personal de salud ocurrió anoche, dentro de la Institución frente al departamento de enfermería en el cambio de guardia, cuando ingresó un paciente con un brote psicótico acompañado de un policía de la Ciudad. Lo más urgente en esta situación es la estabilización del paciente.
“Son servicios difíciles que tienen bastante personal de enfermería, como ha habido situaciones donde no se podía conciliar una correcta atención teniendo uniformados policías armados y de civil, dentro de los servicios, se logró que salieran del servicio, entonces están como en una antesala. En esa antesala, había un efectivo de civil sin identificar armado, que se metio en una discusión entre dos compañeros de trabajo que estaban intercambiando ideas sobre el trabajo diario. Este policía interviene y obviamente, los enfermeros le dijeron, ¿y vos quién sos?. Al policía de civil no le gustó la respuesta, golpea a uno de los enfermeros y el resto de los compañeros saltaron a defenderlo”, contó a Tiempo Nancy Albornos, enfermera del Borda.
La situación terminó con tres trabajadores del Borda presos: Un camillero y dos enfermeros , todos golpeados por la policía porteña.
“Éste oficial, que nunca se supo quién era, ni a qué comisaría pertenece, ni a qué paciente venía a cuidar, fue el que motivó todo este escándalo increíble”, remata Albornoz.
El camillero está aún detenido en la comisaría 4D, encarcelado con población común; y los otros dos están en la Alcaidía Comunal 4 Bis situada en la calle Cochabamba al 1200.
“En este momento estamos llegando a la comisaría porque fueron trasladados de una sección a otra. Primero queremos garantizar con los abogados la libertad de los compañeros, porque no están en calidad de demorados, sino están en calidad de detenidos porque saben perfectamente quiénes son, saben que son trabajadores de la salud. Queremos garantizar primero que los compañeros salgan, que estén en su hogar donde corresponden”, dijo a Tiempo Román Fernández, delegado de Sutecba y enfermero del Borda.
Los empleados del Borda rechazan la versión oficial de la Policía porteña que, según el informe elevado por los uniformados, los agresores fueron los trabajadores y los enfermeros.
“En primer lugar, nuestros compañeros son víctimas y ellos están golpeados. Ellos fueron agredidos intencionalmente, sabemos que el informe es mentira. Y tenemos a todos los compañeros de la noche como testigos. Seguramente vamos a movilizar y vamos a empezar a hacer los cortes que corresponden para manifestarnos, para que no nos pase más esto. A ningún enfermero, administrativo, camillero, médico, quien sea”, agregó Román.
La Asociación de Licenciados en Enfermería (ALE), mediante un comunicado cuestionó: “¿Cómo podemos garantizar la atención integral a pacientes en un entorno de salud mental como el Borda, si la policía irrumpe como un cuerpo de ocupación, sembrando terror en lugar de protección?”.
En ese sentido, Andrea Ramírez, referente de ALE, en diálogo con Tiempo repudió los hechos ocurridos en el Hospital Borda y manifestó: “los compañeros fueron víctimas brutales del accionar policial. Esto pasó cuando un agente de la policía, abusando de su autoridad, lastimó a los compañeros en un claro ejercicio de poder arbitrario y procedió a denunciarlos y a hacerlos detener junto a otros trabajadores presentes”.
Por su parte, desde ATE también repudian el hecho: “volvemos a denunciar que la policía NO puede estar en el hospital. Desde ATE volvemos a expresar nuestra solidaridad y declaramos el estado de alerta y movilización hasta tanto nuestros compañeros sean liberados. Somos un hospital no una comisaría”.