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Los ocho destinos argentinos que compiten en octubre próximo para ser los mejores pueblos del mundo están situados del centro del país hacia el norte. Maimará (Jujuy), San
Los ocho destinos argentinos que compiten en octubre próximo para ser los mejores pueblos del mundo están situados del centro del país hacia el norte. Maimará (Jujuy), San Javier y Yacanto (Córdoba), Villa Elisa (Entre Ríos), Seclantás (Salta), Saldungaray (Buenos Aires), Famatina (La Rioja), Colonia Carlos Pellegrini (Corrientes) y Uspallata (Mendoza) fueron finalmente los elegidos de una nómina que antes tenía 30 candidaturas.
Estos pueblos fueron seleccionados por un jurado convocado por la Secretaría de Turismo, Ambiente y Deportes de la Nación para participar de Best Tourism Villages, un proyecto global impulsado por ONU Turismo que busca reconocer a pequeñas comunidades ubicadas en entornos rurales, con menos de 15 mil habitantes, que preservan y promueven sus valores culturales, naturales y su estilo de vida.
Desde su creación del certámen en 2021, la Argentina fue distinguida en varias ocasiones por ONU Turismo. Pueblos como Trevelin (Chubut), La Carolina (San Luis), Caviahue-Copahue (Neuquén), Villa Tulumba (Córdoba), Caspalá (Jujuy) y Gaiman (Chubut) fueron reconocidos el año pasado por su compromiso con un modelo de turismo que pone en valor a las comunidades.
El diferencial del Best Tourism Villages es que distingue a los pueblos que mediante el turismo, promueven el desarrollo de la actividad, transmiten sus valores culturales y naturales, y preservan su estilo de vida a diferencia de otros certámenes en lo que se distingue los destinos más populares, con paisajes imponentes o mejor infraestructura turística. Los resultados a nivel mundial se darán a conocer a partir de octubre.
La selección de los candidatos argentinos se dio a conocer este jueves en la sede de la Secretaría de Turismo, Ambiente y deportes que conduce Daniel Scioli, quien recibió al secretario general de ONU Turismo, Zurab Pololikashvili.
Es una de las puertas de entrada a los Esteros del Iberá. Se encuentra en el corazón de la provincia con tan solo 1.120 habitantes y se ha transformado en uno de los destinos más representativos del turismo de naturaleza.
El desarrollo de la localidad comenzó a tomar fuerza con la creación de la Reserva Provincial Iberá, hoy Parque Nacional. Entre las actividades más destacadas se encuentran el avistaje de aves y fauna autóctona como carpinchos, ciervos de los pantanos y yacarés.
A poco más de 300 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), es un destino ideal para quienes buscan descanso, naturaleza y un ambiente acogedor. Con una población de 14 mil habitantes, combina la tranquilidad del entorno rural con servicios de calidad pensados para el bienestar integral del visitante.
Mantiene vivo el legado de sus inmigrantes, que se refleja en su cultura del trabajo, sus paisajes agrícolas, su gastronomía casera y, sobre todo, en la hospitalidad de su gente. Su principal atractivo turístico son las conocidas aguas termales, fuente natural de relajación y salud.
Es en la región de Traslasierra, y casi 3.000 habitantes pueblan este lugar al pie del majestuoso cerro Champaquí -el punto más alto de la provincia-, que ofrece un entorno privilegiado, con un 80 por ciento de su territorio cubierto por bosque nativo, vistas excepcionales y que expresa un gran compromiso con la preservación ambiental.
Este destino propone una experiencia turística orientada al bienestar y al contacto directo con la naturaleza. El trekking, el enoturismo, el ecoturismo y el turismo rural forman parte de una oferta diversa, ideal para quienes buscan descansar, reconectar y explorar el paisaje serrano.
A poco menos de 80 kilómetros de la capital provincial de San Salvador de Jujuy, Maimará representa una joya cultural y paisajística dentro de la Quebrada de Humahuaca, declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO.
Los cerca de 3.500 habitantes expresan un mixtura entre las tradiciones ancestrales y la naturaleza imponente, dada por la Paleta del Pintor, una formación montañosa multicolor bañada en su base por el río Grande. Este paisaje enmarca los valles donde se cultivan frutas, hortalizas, flores y viñedos que dan origen a reconocidos vinos de altura. También es tierra de profundas raíces culturales, como la celebración de la Pachamama y el Carnaval.
El pueblo cobija a 190 personas y fue declarado Lugar Histórico Nacional. Otras con 1.000 habitan en sus alrededores. La Precordillera de los Andes es el marco de este rincón de los Valles Calchaquíes salteños donde la cultura, la historia y la naturaleza se entrelazan para ofrecer una experiencia auténtica.
Aún conserva en sus calles, iglesias y construcciones coloniales un valioso patrimonio que invita a viajar en el tiempo y a descubrir la identidad del noroeste argentino. Más allá de su riqueza arquitectónica, el pueblo también es reconocido por un legado cultural que trasciende generaciones. Con orgullo, es conocido como Cuna del Poncho Salteño.
A 100 kilómetros de Bahía Blanca, en el partido de Tornquist, combina historia, paisajes serranos y un valioso legado arquitectónico. Con una población de aproximadamente 1.300 habitantes, se encuentra enclavado en un valle del sistema serrano de Ventania.
Sus orígenes se remontan a principios del siglo XIX, cuando se estableció un fortín militar destinado a proteger a los primeros hacendados que comenzaban a instalarse en la región. Hoy se puede visitar una representación de ese legado histórico. Uno de los aspectos más distintivos es su patrimonio arquitectónico, a partir de la huella que dejó Francisco Salamone mediante la construcción de varias obras monumentales.
A los pies del imponente Nevado del Famatina, que domina el paisaje y le da identidad a la región, se encuentra este pueblo de 7.000 habitantes. Posee un valioso patrimonio histórico, natural y cultural, en el que se destaca el paso del Camino del Inca o Qhapaq Ñan, una red vial ancestral declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO.
Si riqueza histórica y paisajística la distinguen pero la localidad también es reconocida por sus producciones agrícolas, especialmente de nogal, vid, olivo, hortalizas y frutas. La zona también invita a disfrutar de actividades al aire libre, como el montañismo y otros deportes de aventura, que encuentran en el entorno natural un escenario privilegiado.
Pueblo de 6.300 habitantes, ubicado en el departamento Las Heras en el majestuoso entorno de la cordillera de los Andes. Rodeado de imponentes montañas y verdes oasis, revela un paisaje imponente y resguarda una rica historia marcada por hechos significativos a lo largo de los siglos.
Su posición estratégica, se convierte en la puerta de entrada a los sitios turísticos más emblemáticos de Mendoza como el cerro Aconcagua, el centro de esquí Penitentes y el icónico Puente del Inca. Además, ocupa un lugar clave en la historia de la gesta sanmartiniana, ya que fue uno de los pasos fundamentales en el Cruce de los Andes realizado por el general San Martín y su ejército libertador.
