Con su estilo frontal y sin rodeos, Lali Espósito volvió a dejar en claro su postura política. Fue este viernes por la noche, en la puerta del teatro donde Moria Casán estrenó Cuestión de género, cuando la actriz y cantante fue abordada por la prensa y respondió sobre el “tema del momento”: la polémica por los dichos de Ricardo Darín sobre el precio de las empanadas y los ataques posteriores desde el oficialismo.

“No puedo creer que estemos discutiendo esto. Me parece bizarro. Fue clarísimo lo que quiso decir”, dijo Lali sobre Darín. “Estamos en una época corta, chata en las conversaciones, tan en lo poco importante. Si vamos a bardear a Darín por dar una opinión como cualquier ciudadano que pagó algo caro, es porque está buenísimo pegarle a Darín en este momento, porque es el foco del momento. Yo también lo he sido en otro momento”.

En la misma línea, Espósito recordó el escándalo mediático que vivió ella misma tras las elecciones presidenciales de 2023, cuando fue atacada directamente por Javier Milei. “Hay una cancelación constante. Es una época insoportable, cínica, con cero profundidad. Está todo muy tuitero. Me parece mal que alguien no pueda opinar. Ya sea que te encante Milei o que no te encante, todos deberíamos poder decir lo que pensamos sin que nos ataquen con ese nivel de saña total”.

Lali y diez más

Lali fue una de las primeras figuras públicas en solidarizarse con Darín, quien protagoniza El Eternauta, la serie de Netflix más vista del momento, y que recibió duras críticas oficiales por mencionar en el programa de Mirtha Legrand que una docena de empanadas le costó 48 mil pesos.

“Creo que hay cosas que importan mucho más, como el Garrahan, por tirar algo”, agregó Lali, aludiendo al desfinanciamiento del hospital pediátrico. “Sin embargo, estamos hablando de una empanada”.

Consultada sobre si había hablado con Darín, la artista respondió que mantienen una buena relación y que lo respeta profundamente: “Darín sabe todo y se nota cuando habla. Me solidarizo con él y con todos los que reciben ese nivel de hater. Todos deberíamos poder hablar con el presidente o sentir que el presidente nos representa, aunque no estemos de acuerdo con sus políticas. Se torna difícil ese ida y vuelta con alguien que llama mandriles a quienes no opinan como él. Te sentís raro. Yo vivo en este país, es donde aporto, de donde soy. Es raro no sentirse representado, y no hablo de partidos políticos”.

Aunque también habló de otros temas, incluido su vínculo con el periodista Pedro Rosemblat, el foco de su intervención estuvo puesto en el clima político y mediático que atraviesa la Argentina.

Lali viene de llenar dos Vélez y se prepara para otros dos shows más. El próximo será el 14 de junio en Rosario. En el espectáculo anterior, la propia Moria Casán participó sobre el escenario en un momento que ya quedó registrado como uno de los highlights del año para el pop argentino. La complicidad entre ambas se hizo visible también en la alfombra roja, donde Lali, con su impronta habitual, volvió a tomar posición. Y sin vueltas.