October 10, 2025
Politica

el peronismo puede escucharlos como necesitan”

  • September 29, 2025
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“Hay un futuro después de Bessent”, asegura Rafael Bielsa. El abogado constitucionalista, excanciller y exembajador en Chile elige la frase como síntesis del tiempo que vive el peronismo.

el peronismo puede escucharlos como necesitan”


“Hay un futuro después de Bessent”, asegura Rafael Bielsa. El abogado constitucionalista, excanciller y exembajador en Chile elige la frase como síntesis del tiempo que vive el peronismo. Fortalecido tras las elecciones bonaerenses, el principal partido opositor monitorea al detalle la evolución del anuncio del salvataje de EEUU. Bielsa dimensiona las implicancias para el futuro que tendría, de concretarse, el acuerdo con el Tesoro: condicionamiento para las próximas generaciones, limitaciones para los próximos gobiernos.

La concreción del salvataje parece pospuesta para el período inmediatamente posterior al 26 de octubre; quizá está atada al resultado electoral. Bielsa, a la hora de definir el acuerdo, lo describe con crudeza. “Se puede resumir en un conjunto de grilletes para inmovilizar la voracidad financiera exacerbada de Argentina”, dice. Pero enseguida agrega una pregunta retórica, un comentario que lo aleja de un rechazo lineal: “¿Es eso malo? No necesariamente solo porque beneficie y haya sido otorgado a LLA”.

En esta entrevista, contestada por escrito, Bielsa vaticina que la Argentina de los próximos años seguirá alejada de las ‘vacas gordas’. Más bien atravesará -dice- un tiempo de “sacrificio” aunque el desafío será cómo “repartirlo” mejor entre los distintos sectores sociales. “Es necesario que alguna vez ganen los que ganaron poco y que sacrifiquen los que siempre se beneficiaron”, amplía.

El exdiplomático con experiencia en coyunturas electorales (en 2005 fue elegido diputado nacional en representación de CABA; en 2007 compitió por la gobernación de Santa Fe, su provincia natal) propone a todo el peronismo meditar bien su reacción pública ante el -por ahora declamado- paquete de salvataje. “El país y el peronismo son demasiado importantes como para improvisar, disparar al boleo, cargar perdigones o repetir rencores estomacales”, aconseja. E insiste: “No es momento para frases hechas”.

-¿Qué implicancias tiene para el PJ el supuesto swap con EEUU?

Las implicancias para el peronismo no están relacionadas únicamente con ser la principal fuente opositora y un potencial proyecto de poder, en tanto los anuncios del secretario del Tesoro Scott Bessent suponen medidas locales y exteriorizan políticas norteamericanas que deben ser pesadas, contadas y divididas, antes de emitir posiciones vociferantes, con abundancia de adjetivos y descalificaciones. La Argentina está endeudada en el 80% de su PBI anual; Francia, en cerca del 120%. Ni somos el peor de todos, ni debemos un puñado de dólares. Dicho lo cual, hay algunas cuestiones en las que tenemos que pensar con prisa y sin pausa, y si el peronismo las piensa primero, mucho mejor. ¿Viene una época de vacas gordas? No a mi juicio. Salvo para los grandes productores agropecuarios, y hay que verlo. ¿Habrá más sacrificio? Desde mi punto de vista sí, pero cansa menos si se reparte mejor. Lo recibido de EEUU no sería tan malo si no fuera que está destinado a cosas a las que preferiríamos que no se destinase, y si no supusiésemos tanto por la obligación de imaginar por poco conocer. Se puede resumir el paquete en un conjunto de grilletes para inmovilizar la voracidad financiera exacerbada en Argentina. ¿Eso es malo? No necesariamente sólo porque beneficie y haya sido otorgado a La Libertad Avanza. Hay otros interrogantes. ¿Qué quiere decir “evitar una volatilidad excesiva”? ¿Cómo se materializa? ¿Es un programa económico completo para nuestro país no hecho aquí? La construcción de confianza, ¿mirará sólo a los pesos pesados o a todos los argentinos, a la apropiación financiera o a la actividad productiva, será institucional o sectorial? ¿En qué medida?

-¿Cuál sería la garantía de repago si EEUU concreta la operación de intercambio de monedas? Se menciona el antecedente del Fondo de Estabilización Cambiaria y la ayuda a México, en 1995.

¿Cuáles son las versiones argentinas del petróleo mexicano y la empresa Pemex, la empresa estatal dedicada a la exploración, producción, refinación y comercialización de petróleo y sus derivados? Bessent dijo, refiriéndose a la reunión con Milei, que desde la administración republicana estaban «listos para hacer lo necesario para apoyar». Como, por ejemplo, comprar deuda gubernamental secundaria o primaria. Frente a ello, ¿cómo se comportará el presidente autóctono frente a la sociedad? ¿Y cómo lo hará la sociedad frente a la aceptación o rechazo del Tío Rico (por Donald Trump) que se hizo amigo del argentino chillón (Milei)? ¿La gratitud frente al involucramiento o el enojo frente a la intromisión? Podemos imaginar los humores del oficialismo, pero estas cosas se miden por decisiones ajenas, más que por humores propios. Hay partes de lo anunciado que podrían no ser empleadas. ¿Tendrá esta gente el temple necesario como para hacerlo o será superada por la voracidad y la codicia? Pero, además, no es lo mismo hacerle jugarretas al capital privado que hacérselo al Tesoro norteamericano. Los argentinos necesitan ser escuchados: el peronismo puede escucharlos como necesitan.

-¿Concretar un swap con EEUU implica desarmar el swap con China? ¿Beijing podría reducir sus compras de soja?

-Argentina no está necesariamente obligada a desarmar el swap con China, ni China lo está a hacer lo propio. Un país puede tener acuerdos de swap con más de un país al mismo tiempo. Es una práctica bastante común en el ámbito financiero internacional. Un swap de divisas es un acuerdo entre dos bancos centrales para intercambiar monedas por un período determinado. Sirve para fortalecer reservas internacionales, facilitar el comercio bilateral y proveer liquidez en moneda extranjera en momentos de tensión financiera. China tiene acuerdos de swap con decenas de países, como con Argentina, con Brasil, con Rusia, y con varios países asiáticos y africanos, lo cual forma parte de su estrategia de internacionalización del yuan. Estados Unidos, a través de la Reserva Federal, ha establecido líneas de swap con bancos centrales de economías avanzadas, como el Banco Central Europeo, el Banco de Japón, el Banco de Inglaterra, entre otros. Argentina, además de los swaps con China, exploró acuerdos similares con Brasil y otros países del Mercosur. Tener swaps múltiples diversifica las fuentes de liquidez, ofrece mayor respaldo en situaciones de crisis cambiaria y mejora de relaciones diplomáticas y comerciales. Por todas estas cuestiones, a Argentina no le convendría dar de baja su sistema swap con China. En cuanto a China, la mayor parte de los 7000 millones de dólares que el agro argentino liquidó en apenas tres días bajo el decreto 682/2025, que suspendió temporalmente las retenciones, tuvo como destino principal a la República Popular. Según algunos especialistas del mercado y de fuentes oficiales, China aprovechó la oportunidad para comprar grandes volúmenes de soja argentina, beneficiándose de una especie de “feriado impositivo” que eliminó los derechos de exportación. El único que razonablemente podría oponerse es Norteamérica, y si se opusiera China evaluaría sus contramedidas, entre ellas comprar productos primarios a Brasil. Por otro lado, este último “feriado” generó preocupación en el propio Bessent, quien expresó públicamente que su país trabajaba con Argentina para poner fin a ese beneficio, el “feriado impositivo”, ya que afecta la competitividad de los productores estadounidenses. Sin lugar para los débiles, como en la película con Javier Bardem.

-¿Las condicionalidades de lo anunciado por Bessent afectarán al próximo gobierno?

-Aunque no las conozcamos en profundidad, dado que son potenciales, afectarán a todos los argentinos, a unos más y a otros menos. Y, por lo tanto, afectarán a un eventual gobierno. El cómo y el porqué, el modo y la causa, los tendremos parcialmente sabidos cuando llegue el tiempo. En lo personal, añadiría que hay que pensar estrictamente: debemos asumir que este gobierno de vergüenza (por la administración de Milei) no es la causa de los dolores futuros, sino la consecuencia de los errores pasados. Si elegimos lo segundo, en el análisis llegaremos indefectiblemente a nuestra idea de Nación, nuestro tenor moral colectivo, nuestro orgullo por nuestro país y nuestra nacionalidad. Son todas cuestiones que están en la delgada línea roja, y no estoy interesado en echarle a nadie la culpa de manera personal. No siento que lo mejor sea la alcahuetería entre semejantes. También hay que pensar en la importancia que se da al triunfo por oposición a la derrota, y la benevolencia con que se trata la comodidad por oposición al sacrificio. Ni el triunfo debiera de ser tan inapelable, ni el sacrificio tan irritante. Lo que sí es necesario es que alguna vez ganen los que ganaron poco y que alguna vez se sacrifiquen los que siempre se beneficiaron.

-Hace pocos días, el exdirector del FMI para el Hemisferio Occidental, Alejandro Werner, dijo que Kicillof representa una mirada anacrónica y perjudicial para el país. También planteó que una renegociación de la deuda con el organismo en la que se reconozca solo la cuota-parte que le correspondía a la Argentina es impracticable. ¿Qué opina de esos dichos?

-Hay una diferencia esencial entre lo que “representa” la mirada de Kicillof para Werner respecto de lo que “es” para sus compatriotas. En las repercusiones de lo dicho, esto no se toma en cuenta. Alejandro Werner, aunque nació en Argentina, es mexicano, y está más claramente vinculado a la actividad financiera, tanto por formación como por trayectoria profesional. Está doctorado en economía por el MIT y su trabajo en el Banco de México y el FMI lo posicionan como un experto en macroeconomía, política fiscal y estabilidad financiera. Trabajó en análisis de mercados, deuda soberana, balanza de pagos y reformas estructurales, más que en desarrollo industrial o producción. Y fue funcionario del FMI hasta 2021, creo. A mi modo de ver las cosas, Werner representa una voz algo sesgada, en una dirección que no prefiero. Luego, lo que es perjudicial para la Argentina bajo sus ojos, puede no serlo bajo los ojos de los argentinos. En cuanto a lo que es impracticable, me pregunto qué hubiese declarado sobre que Macri requiriera 55 mil millones de dólares, antes de que el FMI le otorgara a su gobierno el crédito más grande en la historia, y también el más desproporcionado en relación con el aporte argentino, luego reforzado por un Servicio Ampliado (SAF) por 20 mil millones de dólares otorgados al actual gobierno. Tal vez menoscabe a las instituciones internacionales, a las democracias y a la política; es un exceso de menoscabo, según lo que yo pienso. En cuanto a lo anacrónico y a lo moderno, nadie está obligado a entender el peronismo. Pero para interpretar con profesionalismo de qué se trata en su conceptualización económica, hay que haberlo estudiado y estar informado; si además se lo entiende, no sobrará. Para Werner los sentimientos envejecen. No es así. Podrán envejecer los objetos de los sentimientos, pero los sentimientos son subjetivos. O se comparten o se respetan, pero no se califican. Por otro lado, yo no reivindico ningún cercenamiento del pago de la deuda en particular, y repito: ninguno en particular. Pero lo impracticable o no, es territorio de la física cuántica y de la política. Muchas cosas fueron impracticables en las vidas que nos tocaron vivir, y las practicamos. Me interesan las declaraciones de Werner, aunque no para encontrar respuestas buscadas, sino para eludir obstáculos manifiestos. Seguiremos buscando esas respuestas en el futuro. Que es donde estarán, junto a quienes estemos y quieran estar.



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